jueves, 24 de julio de 2008

Apuntes de fotografía. Pintando con la luz

Supongo que si buscasemos la etimología de fotografía nos encontrariamos con que su origen probiene de las palabras griegas photos (luz) y graphein (grabar), es decir, grabar con luz. El origen de esta palabra, define fantasticamente lo que estamos realizando cuando pulsamos el botón de disparo de nuestra cámara.

En el momento de pulsar el botón, permitimos que la luz entre en la camara e ilumine una pelicula o un chip sensible a la misma, quien recoge la imagen recibida. Vale, esta definición es muy de estar por casa, pero creo que resume a grandes rasgos lo que está ocurriendo. El truco de todo consistira en dejar entrar la cantidad de luz justa para que la imagen se recoga correctamente en nuesta camara.

En caso de que no haya llegado suficiente luz a la camara, nos encontraremos con una image subexpuesta en la que el motivo aparece oscuro y carente de detalles. Si por el contrario, nuestro sensor recibe mas luz de la necesaria para plasmar la imagen, esta nos aparece sobreexpuesta o quemada. Los colores carecen de brillo y la imagen se ve blanquecina.

Veamos un ejemplo. Las siguiente secuencia muestra un mismo motivo pero con distintas exposiciones. La primera de ellas esta subexpuesta. La imagen se ve oscura sin vida. La imagen de la derecha esta sobreexpuesta. El blanco inunda todo y apenas se ve el detalle de la flor. Solo la imagen central está expuesta correctamente.



Y a todo esto la pregunta que se me ocurre a mi es ¿como demonios se cuanta luz necesito? ¿como aumento o disminuyo la luz necesaria?

Para eso os emplazo al próximo capitulo de mis Apuntes de fotografía

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